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Galaxia con planetas iluminados por el sol

MÁS ALLA DE LOS 365 DÍAS DEL 2025

Bienvenido al primer recorrido de nuestro viaje cósmico en el 2025. Para ello, te invito a imaginar por un momento que no tenemos un calendario que nos marque el tiempo y que dependemos de la luz natural para medirlo. Entonces, con los años, empezaríamos a darnos cuenta cómo la duración de los días no es la misma en el transcurso de un año, ya que en el verano son más largos y en el invierno más cortos. También, seriamos capaces de ver cómo ocurre lo contrario con las noches.

Tal vez, veríamos cómo la luna con sus fases nos puede dar una pista del transcurrir del tiempo. Así, después de muchas observaciones, empezaríamos a crear una forma de medir el tiempo, basados en el movimiento aparente del sol y los cambios de la luna. Probablemente, crearíamos un calendario solar, lunar o solilunar como lo tienen muchas culturas.

NUESTRO PROPIO CALENDARIO

Sin embargo, como los calendarios ya están hechos, es fácil perder la oportunidad de reconocer las cualidades del tiempo y sus cambios permanentes. Ver los ciclos y ritmos que constantemente se están manifestando ante nuestros ojos y que solo requieren un poco de atención para ser descubiertos.

Una forma sencilla de hacerlo es mirar la naturaleza. Si estás en Colombia, a principios de enero empezarás a ver mangostinos, ya que en este tiempo es, cuando la fruta empieza a madurar y después verás una pequeña cosecha a mitad de año. Si estás en España, la cosecha de espárragos te hará saber que estás entre finales de marzo y el final de mayo. Y en México, verás la cosecha de calabazas en los meses de septiembre, octubre y noviembre, poco antes de las heladas de invierno. Durante julio, agosto y septiembre encontrarás la temporada de monzones en la India. Los huracanes en el Caribe generalmente ocurren de junio hasta el 30 de noviembre, mirar los cambios que ocurren en el viento durante el año, prestar atención a la lluvia, a las mareas, a la brillantez de la luz solar, no habla de las cualidades que exhibe el tiempo.  

SOMOS LA NATURALEZA

Las exigencias de la sociedad moderna nos han llevado a desconectarnos de la naturaleza y a olvidar que somos ella misma, al tiempo que dependemos de ella. Pero es suficiente con mirar a nuestro alrededor para reconocer que nos alimentamos de lo que la naturaleza nos provee. De manera que si las cualidades del tiempo se expresan en la naturaleza, cabe pensar que también se manifiestan en nosotros mismos. 

En el texto “De la vida y obra de C.G. Jung”, Aniela Jaffe explica como el psiquiatra suizo consideraba la astrología como una función del tiempo. Decía que de la misma manera que un buen conocedor puede decir con absoluta certeza la cosecha y la proveniencia de un vino, un buen astrólogo puede decir a una persona en qué signos zodiacales se encontraban el sol, la luna y el ascendente en el momento del nacimiento. Y añadía que, este conocimiento es posible porque el tiempo no es un concepto abstracto, sino que debe entendérselo como un flujo de energía lleno de cualidades.  

ASTROLOGÍA PRÁCTICA

Con estas ideas en mente, es fácil imaginar que si prestamos atención a dichas características del tiempo vamos a poder empezar a verlo de una manera diferente. Podemos empezar a notar los cambios sutiles que nos muestra el día a día. También, las transformaciones más evidentes como los cambios de las estaciones. Luego podemos empezar a explorar nuestros “cambios climáticos” a nivel interno. Lo mismo aplica a nivel personal en el día a día y a través de los años. 

Podemos fijar nuestra mirada en nuestros comportamientos y darnos cuenta cómo en ciertos ambientes somos más invernales. O cómo, a veces, somos más primaverales con determinadas compañías o tal vez más cálidos y veraniegos. Con esta investigación a nivel personal, en el día a día y a través de los años podríamos descubrir las cualidades de nuestro tiempo interno. 

 Así, poco a poco nos podríamos acercar a la comprensión de que el zodiaco no está afuera, allá lejos, en el cielo, sino que la manifestación de sus cualidades está aquí en la naturaleza y por supuesto en ti y en mí que también somos naturaleza.

Empecemos el 2025 con ojos de investigadores, como turistas que viajan en esta nave espacial llamada Tierra y que con gran curiosidad se abren a explorar el mundo de afuera con sus cambios y  acontecimientos y el mundo de adentro con todo lo que tenemos por descubrir. FELIZ 2025.

Olga Lucia Toro

Astróloga.

Psicóloga y Periodista, U. Sabana. 

Master In Mental Health, FAU.

7 de enero de 2025

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